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Todas las previsiones apuntan a que este ejercicio comercial podría ser negativo para los intereses de los pequeños y medianos inversores. Tras muchos años en los que la inversión en los mercados de renta variable ha sido muy positiva, con rentabilidades anuales del ahorro alrededor del 10%. Ahora parece que esta tendencia se ha roto, pero con la ventaja de que existen instrumentos financieros que pueden recuperar la tendencia bajista en los mercados financieros. Como en el caso concreto de la venta a crédito y que te vamos a aclarar cómo formalizar este modelo tan especial de inversión privada.

La venta a crédito es un modelo que se basa especialmente en el hecho de que puede beneficiarse de las caídas en los mercados de valores alrededor del mundo. Debido a que, en efecto, cualquier depreciación de valores o índices bursátiles puede ser usada por pequeños y medianos inversores para alcanzar una rentabilidad sustancial de los ahorros. No obstante, el mayor peligro en su contratación proviene de que las pérdidas son más pronunciadas que en otra clase de instrumentos financieros, como la compra y venta de acciones en bolsa en el sentido más clásico.

Mientras que por otra parte, la venta a crédito es un modelo de inversión más avanzado que además se caracteriza por imponer periodos de retención más cortos que en otros formatos. Generalmente son operaciones que van en términos de 3 o 4 meses y ese es el período en el que los valores deben depreciarse. Sea cual sea el caso, son movimientos que conllevan muchos más riesgos y por tanto no tendrás más remedio que aportar un mayor aprendizaje en este tipo de operaciones en los mercados de renta variable. No puedes olvidar que hay mucho dinero que puedes dejar al final.

Ventas a crédito: posiciones abiertas

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La primera pregunta que debes hacerte a partir de ahora es cuándo iniciar operaciones con estos movimientos descendentes. Pues bien, está muy claro que se materializa cuando las bolsas comienzan o continúan con una tendencia de forma clara a la baja. Cuanto más se devalúen, mejor para sus intereses como pequeños y medianos. Entre otros motivos debido a que sus ganancias de capital serán mucho más sustanciales. No te asustes debido a que su mecánica funciona de esta dinámica innovadora y eso te posibilita tener siempre posibilidades de negocio en los mercados de renta variable.

Por otra parte, además hay que resaltar muy sobre todo que las ventas a crédito constituyen una poderosa herramienta para adaptarse a todos los escenarios en las bolsas de todas partes. Esta es una diferencia sustancial con la compra y venta tradicional de acciones en los mercados de valores. Cualquier diferencia puede implicar un monto monetario muy importante por lo que las ventas a crédito no deben formalizarse por montos muy importantes dado que pueden tener un gran impacto en el estado de resultados de tu cuenta de ahorros.

¿Con qué activos trabaja?

En nuestro país, las operaciones se limitan más a índices bursátiles que a sociedades cotizadas. A tal efecto, existen operaciones cortas sobre todos los principales índices bursátiles del viejo continente. Dicho de otra forma, sobre el Ibex 35, CAC 40, DAX, etc. Pero además sobre los valores más relevantes que los integran y que suelen coincidir con los de mayor capitalización. A modo de ejemplo, en Santander, BBVA, Endesa o Inditex, entre algunas de las compañías más importantes que cotizan en bolsa.

Por otra parte, resulta mucho más complicado realizar ventas a crédito sobre acciones de mediana y pequeña capitalización. No son sensibles a este tipo de operaciones y en más de una ocasión estos movimientos han sido prohibidos debido a que pueden condicionar la configuración de los precios de estas propuestas en los mercados financieros. Más allá de otra serie de consideraciones técnicas y tal vez inclusive desde el punto de vista de sus principios fundamentales. Dicho de otra forma, sus operaciones son más limitadas en número.

¿Estás interesado en estos productos?


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En cualquiera de los casos, no hay duda de que te interesa analizar si hablamos de un producto destinado al pequeño y mediano perfil de inversor que representas hoy en día. Debido a que es muy importante es importante que sepas cuándo es importante destacar contratar este tipo de ventas únicas. Como a modo de ejemplo, en las siguientes situaciones que te exponemos a continuación:

  • Antes de caída de alta intensidad en los mercados de valores y se desarrollan durante un período de tiempo más largo.
  • Cuando una Cambio de tendencia, pasando de alcista a bajista dado que es cuando los movimientos bajistas son más acusados.
  • En los momentos en que los valores pasar un apoyo y comienza una tendencia bajista de especial consideración y que puede llevar sus precios mucho más bajos de lo que están hoy en día.
  • En momentos de claridad Recesión económica que es cuando los mercados de renta variable se deprecian más, inclusive con una violencia que llama la atención de los pequeños y medianos inversores.
  • En valores que están en descenso libre que es la cifra más negativa que pueden tener dado que no disponen soporte por debajo y sus precios pueden dirigirse mucho más bajos que hasta ahora.
  • Y en general, en todos movimientos recesivos en la economía internacional y que provoquen el colapso de las bolsas de valores en unos días. Es una posibilidad que puedes aprovechar ahora mismo.

Riesgos en las operaciones

Aunque por el contrario, son operaciones con riesgos muy elevados y que debes analizar para no tener más sorpresas en los próximos días. No en vano, hay mucho dinero que puedes perder en cada una de las operaciones que disponen esta característica. Y entre los que resaltan los siguientes que mencionamos a continuación.

  • Su fechas de vencimiento Son mucho más cortos y por tanto hay que tener más cuidado a la hora de firmar una venta a crédito.
  • Son productos de inversión que disponen comisiones y gastos en su administración o mantenimiento que son más exigentes. Hasta el punto de que gastarás más dinero en su formalización.
  • Como tú enfoques de inversión al final no se cumplen, no hay duda de que vas a poder pagar muy caro esta decisión que has tomado de canalizar tus inversiones a través de la venta a crédito.
  • Ellos son más complejo de comprender y que requieren de un cierto aprendizaje en su funcionamiento. Si no alcanza con las condiciones, será mejor que se abstenga de operaciones y se dedique a otros instrumentos financieros.
  • Al tratarse de una modalidad crediticia, es un instrumento financiero muy más penalizado que el resto. No lo olvides a partir de ahora dado que puedes encontrarte con bastantes estorbos en el camino que tendrás hasta su expiración.

Como habrás visto, las ventas a crédito son un modelo de inversión que tiene muchas luces y sombras a lo largo del camino. Te conviene analizarlo dado que es un producto que necesita un mayor esfuerzo económico por parte de los pequeños y medianos inversores. Donde no te sirve formalizarlo sin ningún rigor o análisis técnico. Debido a que al fin y al cabo de lo que se trata al final es de rentabilizar el patrimonio personal, no de realizar ningún tipo de experimento en bolsa.

Para eso existen otros instrumentos financieros más adecuados que no requieren tantos riesgos en las operaciones que vas a realizar a partir de ahora. No es sorprendente que tenga en cuenta que está buscando un producto de inversión distinto y que, decididamente, no consiste en comprar y comercializar acciones en los mercados de valores. Ni mucho menos, si no que por el contrario se rige bajo otros parámetros absolutamente distintos y esto hay que tenerlo en cuenta.

Destinado a corto plazo


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Los pequeños y medianos inversores disponen la oportunidad de recurrir a múltiples productos para invertir cuando las acciones caen en el corto plazo. En la mayoría de los casos consiste en derivados cuyo propósito es alcanzar una alta rentabilidad en cualquier circunstancia de mercado, ya sea alcista o bajista. De cualquier manera, son productos que se distinguen tanto por la sofisticación de sus operaciones así como el alto riesgo que implica para los intereses del inversor. Y que aunque puede conseguir importantes ganancias de capital, además puede perder mucho dinero en el camino.

Uno de los productos más característicos son las denominadas ventas a crédito, y de las que se trata este post, y que tiene un funcionamiento muy bien definido. Donde las entidades financieras se encargan de prestar los valores que el cliente desee, para posteriormente venderlos al precio del día. Entonces el banco le da al usuario un plazo para devolver los valores al precio que disponen entonces y que, según sus previsiones, será inferior al actual. De esta dinámica, el inversor obtendrá la diferencia siempre y cuando el resultado sea positivo en la línea de fondo.

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